sábado, 14 de marzo de 2015

Clàudia está viviendo. Capítulo cinco.



Pues definitivamente tenía un problema. Un grave problema. Pol no paraba de hablarme de esa chica, que no es que me cayera mal.... Bueno sí. Me caía como el culo sin conocerla. Y no entendía porque. El caso es que pensaba en ellos dos juntos y... me tocaba bastante la moral. ¿Tendrían razón las chicas y me estaba enamorando? Supongo que son una de esas cosas que todo el mundo ve menos tú, que todo el mundo te dice y tu haces caso omiso. Para cabezona yo, sin duda. 

-¡Mira, guapa, tu lo que estás es celosa!-me dijo Andrea mientras nos pedíamos una botella de vino. 

-¡Que nooo! Sólo me molesta, es como una corazonada, no le va a salir bien y el se lo está tomando muy en serio. Si le ha dedicado hasta un post en FaceBook, mira...

-Pues está bien buena...

-Eso no me ayuda una mierda, ya lo sé que está buena, como todas. Eso no es una novedad.

-Pero que tu estás mil veces mejor, sin duda alguna...

-No digas tonterías, yo como como una cerda y mis movimientos son nulos. Esta chica se pasa el día esculpiéndose como si fuera una escultura. 

-Nunca entenderé tanta exigencia con el cuerpo de una, que manera de maltratarse.

-No podría soportar el agobio de no poder comer lo que quiera. ¿Seremos raras?

-Somos normales. Nos preocupamos más de otras cosas que no engordar una talla, o dos...

-¡Joder no! ¡Definitivamente somos unas gordas!

-Si amiga, unas gordas pero de comer. 

Y riéndonos entre copa y copa y una buena tabla de embutidos con pan llegué a una nueva conclusión. No iba a cambiar mi manera de ser, ni mucho menos de comer por nadie. Mis hábitos son los que son, soy una politoxicomana declarada. Fumo, como y bebo sin poder evitarlo, ni querer hacerlo. Soy así. Pero al mismo tiempo derivé a la peor conclusión a la que podía llegar... ¿Cambiaría por Pol? Oh, wait... ¿Y yo porque tenía que pensar en eso? 

El caso es que fueron pasando las semanas. En el trabajo tenía fritos a los chicos, a las niñas las tenía rotando el cuello como niñas del exorcista... todo porque me seguía hablando de esa chica. No. Mierda. Joder. Hasta que llego lo inevitable.

-Oye Pepa, -sí, así decidió llamarme un día,- que voy a Barcelona.

-¡¡¡VENGA YA!!! ¿Te quedas en casa, no?- me dejó totalmente pletórica, pero...

-Claro, lo único que he quedado para cenar con ella. Llego a la tarde, así que nos vamos a dar una vuelta, ceno con ella y luego subo a tu casa. ¿Te parece?

¡Pues claro que no me parecía! ¿Pero que le iba a decir? Si ni yo misma sabía lo que me estaba pasando...

-¿Y si tienes postre?- ¿os he dicho que soy, desde siempre, muy masoca? ¿No? Pues ya lo sabéis. 

-No lo creo, Clàudia. Sabes que no soy así. 

-Ya, pero bueno, estarás delante de una tía que está mazo buena. No se yo si te resistirás al postre, querido.- lo mío es sufrir a lo grande. Y fustigarme.

-Bueno, sea como sea, que te lías y ves cosas donde no las hay, ¿te va bien?-¿que veo cosas dónde no las hay? ¡Pero si no paras de hablarme de ella!

-Sí, claro que me va bien. Mi casa es tu casa, ya lo sabes.- y lo que no es mi casa, también.





Y así, unos días antes de que viniera, yo me volví loca del todo. Estaba nerviosa, estaba fatal. Y lo peor de todo, lo único que quería era que le fuera mal con esa chica. Me sentía fatal como amiga, ¿porque pensaba eso continuamente? Joder, al final iban a tener todos razón.

-Vamos a ver, pequeño pony,- me dijo Jaime, uno de mis mejores amigos del trabajo.- no entiendo porque estás tan agobiada con esto. A fin de cuentas, es un amigo que viene a pasar un día y medio.- lo miré con odio por su ironía.  

-¿Alba de que te ríes?

-Joder, cari. Que no es una amigo, o sea sí, pero tu no lo ves así. Vive feliz y acéptalo ya.

Alba. Alba la persona racional. Alba la niña dulce que todo el mundo quiere conocer y tener como amiga. Alba la barbie morena de ojos azules y piel clara, pero de la bonita, no de la vampiro con purpurina. Alba la que decidió fulminarme con una sola frase.

-No es por nada, pero lo ha dicho ella. No lo he dicho yo.- Jaime le dio un trago a la copa por no reírse a carcajadas. Yo me hundí literalmente en la silla.

-Mierda... mierda...- no lo quería decir en voz alta. 

-¡Oh, venga nena! Dilo ya. Repite conmigo... Estoy enamorada de Pol. 

-¿Pero tú quien eres y que has hecho con Alba?- Jaime la rodeó y la estrechó junto a él.- Seas quien seas, quédate.

-¡Oye que soy yo! Y tú. Venga. Repite conmigo... No me pongas esa cara.

Y pasó.

-Vale sí.... Pfff... ¿En serio he de decirlo?- me tape la cara con las manos.

-Sí- resolución al unísono.

-Estoy...- bebí la copa de vino de golpe....- enamorada de Pol.

-¡Bravo!-Jaime rellenó las copas.

-¿Exactamente por qué puto motivo brindamos? Esto no soluciona nada, es una mierda. Y es vuestra culpa. Yo no quería decirlo en alto, no joder, no...

-¡Cállate y bebe! Vivirás mejor así que no ocultándote siempre detrás de algo que no es. No pasa nada, lo estás y ya está. Desde siempre, ahora solo te queda saber si él siente lo mismo. 

-¡Eso si que no, bruja! No, no y no. No pienso decírselo.

-Ya, pero vais a estar juntos. Captarás señales, digo yo.- Jaime y yo nos miramos. De verdad os digo que Alba nos estaba dejando a cuadros. 

-¡Hostia puta con el oso amoroso! Pasas a ser mi nueva ídola.- Alba y yo nos reímos y esta le guiño el ojo. 

-Eso si que no, a mi no me reemplazas quedando impune, querido.

-Tu eres diferente. Como yo te amo...- y le lancé un beso. Seguimos comiendo sushi como si no hubiera un mañana. Pero claro, como a Alba le estaba dando por ser tan contundente, yo no pude evitar pensar todo el rato en las señales.

-Pero Albi, entonces... ¿Qué señales?

-¿Como que qué señales? Clàudia las verás, digo yo. Por eso se las llaman señales. 

-Ya que hoy estás tan dada a dar respuestas a todo, ilumíname un poco más. Señales tipo....

-Pues yo que sé, si se pone nervioso, si se empalma cuando durmáis juntos, ¡NO LO SÉ! Señales del momento, Clàudia. Señales, señales que verás. Para todo. Tanto para ver si está igual que tú como para ver si no lo está.- Alba, nunca grita. Pues lo dijo bien alto. Volví a hundirme en la silla.

-¡Joder con la niña!- y creo que nunca me había reído tan limpiamente como en es momento. Los tres, en medio de un sushi barato en pleno centro de Barcelona. Borrachos de vino de mesa barato y arroz pasado. Borrachos de amor, sobretodo de amor. Y con público. 

Como era de esperar, acabamos de comer y de la comida pasamos al café con copa, del café con copa a la segunda copa. De ahí a casa de Jaime a por la tercera la copa, picar algo mientras nos arreglábamos la cara y de ahí a seguir de copa en copa y tiro porque Pol no paraba de escribirme para preguntarme cualquier cosa. Hasta que las horas ya eran intempestivas y mi estado de embriaguez era supremo. 

Pol: ¿Qué haces, sandalia?
Clàudia: Borracha de amor con Jaime y Alba.
Pol: jajajaja
Pol: ¿Borracha de amor?
Pol: Cuéntamelo....
Clàudia: No puedo. Pero ya estoy bien conmigo misma y ya he aceptado que estoy enamorada. Ahora he de vivir feliz y ya está.
Pol: ¿Enamorada? Te llamo...
Clàudia: Nooooooooooo....

Pero era tarde, ya me estaba llamando.

-Dile que sheee vaya con la guaaaarra eshaaaa- Alba me miraba amenazante señalándome con el dedo. 

-No tíaaaa, no se lo quiero coger. Me va notar que voy borracha...

Y sin más, Jaime cogió el teléfono.

-Mira tú, guapo de cara. Eres un maaaaaaareo, cada puto día ahí y ahora de que....-Me tiré encima de él tapándole la boca y cogiendo mi teléfono..

-¿Clàudia?

-Si, si. Pol perrrrdona, esssh que Jaime es un poco idiota y para rematar hoy no ha follado...

-Vas borracha, ¿eh?

-¿Algún problema?

-No, joder. Pero que es eso de que estás enamorada y ahora vas a ser feliz. ¿Que es lo que no me has contado?

-Ehhm, en realidad es una historia sin sentido, sssssssandalio. Un amor iiiiiiimposile... imposible. Pero ya lo he dicho en alto y me shiento... más libre. Estoy enamorada, no estoy correspondida, pero bueno, no duele tanto.

-¿Pero esa persona lo sabe?

-No, y no lo sabrá nunca. ¿Sabes? No es lo típico que te crees, el no tiene la culpa de que yo me haya enamorado. Es cosa mía, y si se lo digo se irá a la mierda lo que tenemos.

-Ya... pero vamos a ver una cosa. Siempre me dices que diga lo que siento y tal y tal, quizás vives sin esa persona porque si él no lo sabe....

-¡SEÑALES POL, SEÑALES!-y colgué.- Oh mierda, la he liado. Mierda mierda...

-¿Qué, qué, qué?

-Pues que me ha dicho algo así como que si vivo sin esa persona es por que el no lo sabe, que siempre digo de decir lo que uno siente y tal...

-¿Una indirecta?- Alba miró a Jaime.

-¿Y que le has dicho?

-¡Coño, le he gritado "¡¡señales Pol, señales!!" y he colgado! Me he liado, mierda. Se ha notado mucho. Ay dios... ¡ay mierda! Alba tu y tus señales, no, mierdaaaa...

-Vale si, mucha mierda. Pero le has dado que pensar, seguro que ahora se está comiendo el coco y quizás le encajan cosas. 

-Alba tiene razón, pequeño pony. A fin de cuentas te has retirado antes de entender su frase como una indirecta y contestar algo equivocado envalentonada por el alcohol.

Y justo en ese momento llegó un WhatsApp....

Pol: Mira Clàudia, no se de que me estás hablando. O sí, pero me has dejado un poco pillado. Mejor hablamos en otro momento, más tranquilos y tu sobria. Aunque ebria seas muy divertida. ¿Señales? ¿De qué hablas?

-¡Me cago en mi vida anterior, en esta y en la que vendrá!-les dí el teléfono.-¿Qué se supone que tengo que hacer ahora?

Clàudia: Déjalo de verdad. Alba y Jaime me tienen la cabeza en otro sitio, he pagado contigo lo que no tocaba.
Pol: No te creo. Clàudia, esto lo hablaremos, o sí o sí.
Clàudia: Como quieras, pero mejor mañana. Voy a seguir ahogando a las señales.

-¡Esa es buena!- Jaime aplaudió.

Pol: No entiendo nada.
Clàudia: No hay nada que entender. Ves cosas dónde no las hay. 

-Vale, dame el teléfono. Queda confiscado.- Alba me quito el teléfono de las manos, lo guardó en su bolso y por más que le supliqué que me lo diera mil millones de veces, no cayó a mis morritos ni a mis pucheros. Así que pasamos una de las mejores noches improvisadas de mi vida. Y la madre de las resacas al día siguiente. 


Putas señales, la que estamos liando.


Con la boca pastosa, encendí mi teléfono tal y como prometí. Y ahí estaban. Seis mensajes de Pol. 

Pol: ¿Cosas que no hay, dónde?
-media hora después-
Pol: Lo mismo eres tú la que no sabes ni lo que quieres.
Pol: Lo mismo eres tu que mandas unas cosas muy distintas a las que sientes.
-una hora después-
Pol: ¿Clàudia?
Pol: Esto es muy raro. Te llamo y hablamos.
-Dos llamadas perdidas después-
Pol: Mañana cuando te despiertes te llamaré. Y me va a sudar tres cojones tu resaca. 

Mierda. Mierda y señales. 

No entendía ni porque tenía tanto interés en saber por qué y de quién me había enamorado, ni por qué tantísima insistencia. 

¿Señales?







La Bipolaridad masculina no es una leyenda.


Queridos unicorni@s felices. Hoy vengo con una nueva dosis de sabiduría masculina y esta vez me voy a centrar en la bipolaridad. Por que nosotras seremos complicadas, pero ellos son arena de otro costal. ¿Como pueden tener el morro de acusarnos de dar demasiadas vueltas a las cosas, cuando ellos hacen lo mismo? Bueno lo mismo no, hacen algo peor, cambian de opinión constantemente, volviéndote loca. ¿Y que pasa cuando una mujer se vuelve loca por un hombre? Que no pensamos con claridad, que todo lo que hemos aprendido cae en saco roto, es así. Volvemos a la dependencia, volvemos a contestar los mensajes al minuto, volvemos a cambiar los planes en función a sus necesidades y nos organizamos la vida por y para ellos. En definitiva volvemos a ser una capullas. CA-PU-LLAS.

Vamos primero con la definición de la palabra Bipolar. 

bipolar

  1. adj. Que tiene dos polos:
    las pilas son baterías bipolares.

¿Dos polos? Hablemos con propiedad, señores. Dos cabezas, la que contiene la materia gris y la que contiene el palo del amor. Gracias R.A.E, una vez más, has acertado. 



Relájate amigo Gandalf. Tú de eso no tienes. Te lo arrancó el Balrog.

Así que después de aclararos la especie masculina a describir, os los voy a presentar en grupos. 

1. El perro de Sauron. A este cabrón le tengo muchísimas ganas. El Hortelano en el fondo era buen hombre, pero Sauron es un hijo del mal. Ya no es que no puedas comer estando con él, es que te ha comido viva y no puedes ni pensar. Veamos la situación favorita de este cabron, hijo de la grandísima puta;  tenerte ahí para él, usando el "te quiero, eres la mujer de mi vida." ¿Como se puede ser tan nazi? Pues sí. Este hombre te enamora, te enamora de una manera que NUNCA jamás creíste posible. Andas como una nimfómana loca, porque encima está buenísimo  y solo piensas en que te empotre las veinticuatro horas del día, hablando mal y pronto... vas mojada todo el santo día. 


Definición gráfica de Empotramiento

Dicho sea de paso es perro viejo y el cabrón sabe como moverse, como tocarte. Y eso es malo, es muy malo. Pero no solo es el aspecto sexual que nos hace perder el Norte, las bragas y la decencia, no. Se comporta como un verdadero amigo, te ha escuchado y ahora, pedazo de gilipollas, sabe tus puntos débiles. Sabe que te aburrías con tu novio, y ahora te saca a cenar, a comer, al cine o simplemente a dar una vuelta cogidos de la mano. En ese momento tu ya estás muerta en vida, pero en el fondo lo que estás es vomitando corazones de colores cada día. En una nube. Una nube enorme a la que no le ves fin. Y sigue, sigue en su plan macabro de enamoramiento. Te lleva a una ciudades más cuquis del mundo, que se yo, París por ejemplo o a ver Nueva York mientras nieva y te dice que eres la mujer de su vida, que esto es especial, que.... te ama y no puede perderte. 


¡CÁSATE CONMIGO, LLYA!

Tu vida se convierte en una novela romántica, y estás feliz porque el perro sigue y sigue, y ya te conoce todo su alrededor. La relación ya es totalmente seria. ¿Tú crees? ¿Qué hay de tu entorno? Tus amigas saben de él porque eres una chica mono-tema, igual que tu familia y compañeros de trabajo que ya lo consideran una prolongación de tu cuerpo aún sin verlo. En resumidas cuentas, se hace el escurridizo. Tu, como buena fémina, empiezas a desarrollar una mente conspiratoria y buscar los trescientos pies al tigre, en el fondo hay algo que funciona raro, muy raro y le preguntas. Le preguntas mil veces consiguiendo la misma respuesta, "no me pasa nada, tengo trabajo","nada nena, es que hoy ando agobiado" "nada, de verdad, estoy cansado, ¿hablamos mañana?" y un largo repertorio de respuestas de mierda, que tu te crees, pero que van perdiendo peso. Van perdiendo peso como tu alegría. Está raro, lo sabes, lo ves y tu estás hundiéndote en la mierda por la relación más corta de tu vida. Y cuando finalmente explotas, desesperada de amor y llorando como la Zarzamora... se descubre la bestia. Te confiesa tranquilamente por teléfono, ¡POR TELÉFONO!, que está agobiado, QUE NO ERES TÚ, QUE ES ÉL. 

¡CLARO QUE HAS SIDO TÚ!
YO NO HE HECHO NADA, PERO ESO...
¡¡¡NO ES UNA EXPLICACIÓN LÓGICA!!!
YO TE QUIERO, TU ME QUIERES, ¿NO?

No exactamente, querida. Te dijo que lo hacía. Te ha confesado tan pancho, que quería vivir la experiencia. No le busques más explicación. No la hay, son mala gente. Te ofrecen sexo y dinero, pero nena... No todos son Grey o Cross, que se enamoran de verdad y viven en un libro. Ellos son cabrones por naturaleza, les gusta sentirse el macho alpha. Pues muy bien, desde aquí queridos perros de Sauron os deseo una buena ETS o que se os caiga la polla a trozos. Tanto da. O mejor, encontrar a la horma de vuestro zapato y morir de dolor. 

NEXT....


2. El perro de Saruman. Bueno, este es... joder. Este encima es que es tonto y mientras te va jodiendo te vas dando cuenta porque lo hace a cara descubierta. Y eso es lo que más toca los cojones, porque entras en el bucle de la defensa a ultranza con cada persona que te dice que es un cabrón. No lo niegas pero usas el "siempre me lo ha dejado claro". PA-TÉ-TI-CA


Sí querida, es un cabrón de manual.

Y te vuelve completamente loca. Está bueno y encima es un malote. Te dice que no quiere una relación, pero que siente cosas por ti y que quiere verte. Algo súper lógico, vamos. En este caso no estás tan profundamente enamorada y entráis en un duelo de Titanes, midiendo quien puede joder más al otro. ¿Qué una noche te ha dejado tirada? Pues vas a tu archivo de imágenes y te cambias el icono de WhatsApp por la tuya con un tío. Obvio el te escribe con cualquier excusa y tu piensas... "has picado". El riesgo que corremos es que no nos quedamos con que hayan respondido a tu provocación, sino que seguidamente viene el "si ha picado es porque le gusto" y ahí la volvemos a joder

Por poner otro ejemplo tonto, él lleva unos dos días sin decirte nada pese a que habíais quedado, y tu haces lo tuyo pensando "que se joda, yo hago lo que quiero, mi vida no depende de él" Y empieza a funcionar. Esa noche ligas.... pero como te han implantado un microchip, a mi no me jodáis, notan cuando te alejas y entonces, vuelve a aparecer con el ¿Qué tal amore, que hace mucho que no sé de ti?" Te sientes poderosa y le contestas con indiferencia pero de manera cuqui. No le preguntas nada de lo que ha hecho porque representa que no te importa, aunque por dentro te acabará saliendo una úlcera, y entonces te dice que también ha salido y ya te ha jodido otra vez. Por capulla. Te ha dejado tirada y encima te lo restriega bien. ¿Pero ahora como cambias el tono cuqui, a mandarlo a la mierda que es lo que se merece? Pues no lo haces. Te emborrachas, que es mucho mejor. 


Y así una y otra vez.

Lo mejor viene ahora. No habéis intimado. Os habéis toqueteado pero no ha habido sexo. No sabes por que clase de palo del amor estás sufriendo tan tontamente y tanto. Habéis decidiDo no pasar a más porque sino os enamoraréis. Bien, déjame decirte algo, unicornia feliz... Eso es una excusa puramente femenina. La inventamos nosotras por aquello de ir castas y puras al altar. Los hombres DE TODA LA VIDA, lo que hacen es insistir. Insistir siempre. Si no te folla, hablando mal y pronto, tenemos un problema. Pero, el problema lo tendrás cuando te quieras dar de hostias contra la pared porque tiene la polla pequeña y has perdido todo tu interés en el. BRAVO. APLAUSOS. 


Si lo hubieras sabido antes....

NEXT....

Y he decidido parar aquí. Paro aquí por que si bien es cierto que si hay muchos bipolares en el mundo, no todos son unos cabrones. ¿Verdad? Hay algunos que realmente si que tienen excusa, y la diferencia es que no te prometen una relación y siempre te han dicho que no están preparados. Solo que a veces les cuesta darse cuenta que realmente están pillados por ti. Pero este tipo de bipolares para el de la semana que viene, ¿vale? 

Escribir sobre lo que he hecho hoy me pone de muy mala hostia. Y deberíamos dejar de caer en sus redes, de verdad. Querernos un poco más y ser un poco más precavidas. Sí, es cierto que los flechazos existen, pero son reales. Hay mucha gente mala por el mundo y sobretodo mucho cabrón, SOLO y aburrido por nuestras vidas. 



Estamos cojonudas, Miss C
-No, querida. Estamos bien jodidas...

Miss C os quiere MUNCHO. 






 






martes, 3 de marzo de 2015

¿Eres un Fan psicópata?



Unicornios, hoy ya he de explotar.

Sé que muchos se me tiraran encima, pero como viene siendo costumbre, me la suda bastante. Os tengo que dar un poquito de caña. Hacéis de las redes sociales un puto infierno, y por ahí queridos.... ¡NO VOY A PASAR! Hace ya tiempo que quiero escribir acerca de esto. Que los nuevos fans ya no saben ni comportarse, no tienen ningún miramiento, ni siquiera dignidad, ¡POR EL AMOR DE DIOS! Lo que consiguen muchos de ellos, a parte de ser ignorados de una manera bestial por el famoso, es que muchos no se asomen ni de casualidad a ninguna red social. Y ahí nos han jodido a Miss B y a mi.-DJORDJE, HAZTE ALGO YA POR DIOS, PROMETEMOS SER BUENAS.- 


Mira mejor no, porque no te dejaría ni dormir. 

¿Cómo ser un buen fan? Mola un montón tener al alcance de tu mano, teclado o bandeja (no me jodáis, lo de hoy en día NO SON MÓVILES) llamada smartphone la posibilidad de escribirle a un actor/actriz/modelo/cantante/escritor/escritora/blogger/ que te encante "Tío bueno, macizo, con tu culo me hipnotizo!" O " Quiero un hijo tuyo" o " Me encanta tu película" o simplemente etiquetarlo en "Me voy al cine a ver a @talpersonasupermolongui". Mola un montón si, es supercalifragilísticoespialidoso, pero un poco de CORDURA SEÑORAS Y SEÑORES, que se nos está yendo la pinza. 
Así que os voy a presentar a varios tipos de psicofans, para que veáis la diferencia entre lo normal, y lo que para mí roza la locura transitoria. En primer lugar os presento a....

PRIMERO EN COMENTAR. ¿Vale, quieres un premio? Nunca he entendido que gracia tiene decirle a la persona que admiras, una y otra vez que eres el primero en comentar un tweet, una foto o un post. Una y otra vez. Lo mejor de todo es que luego ves que le contesta a la pregunta o a la opinión que ha expresado su ídolo, pero ese día el fan ya puede morirse tranquilo, PORQUE HA SIDO EL PRIMERO EN COMENTAR. Acojonante. 



Seguimos con el famoso.... SÍGUEME POR FAVOR. Una y otra vez, día tras día. Tweet tras tweet, foto tras foto... ¿Pero es que NO ves que pasa de tu cara? ¿Que NO te va a seguir? Seamos sinceros, y es que es normal que el famoso no siga a todo el mundo, no eres amigo suyo. Eres un fan, trastornado,  pero a fin de cuentas, un fan. Todo eso que dicen "Sin vosotros no soy nada" es pura estrategia para que tu, pobrecito mío, sigas siendo su fan. Sin ti sigue siendo famoso, te guste o no. Así que deja de rogarle que te siga, porque lo más probable es que ni siquiera te lea, la vida del famoso es muy dura, y claro... contestar a todo el mundo debe ser estresante. -Ironía modo on-



Por favor sígueme, mi vida sin tu Follow no tiene sentido.

Luego tenemos al fan muerto de amor, ese que suelta una y mil veces en cada uno de sus tweets dedicados a su ídolo el TE QUIERO. ¿Qué sé yo? Ver como alguien pone, "Me he levantado y me voy de rodaje!" y le llueven te quieros, eres mi vida y un larog etcétera de declaraciones de amor, que me dejan anonadada y que por si no lo sabíais, al famoso en cuestión le dan igual. O sea, le hará gracia saber que la gente le quiere y se sentirá honrado por ello, pero... ¿Querer a una persona que no conoces? Es un poco fuerte. Muy fuerte. 


Quiéreme, pero que mira que te digo que tu quiéreme.

Y ahora os voy a describir a los fans que MÁS ME MOLESTAN. Los que no soporto. Bien, no es ningún secreto que soy una fan de la literatura romántica-erótica, y como tal empecé a seguir a grupos y a personas, que como yo, somos fans de alguien. Bien, pues no lo soporto más. Los grupos de apoyo son... en fin. Son un coñazo. Como mujeres que somos, nos centramos en los musos, en los tíos... y por si no lo sabéis muchos de ellos, están hasta los mismísimos cojones de los movimientos literarios. De repente se encuentran con miles de comentarios con proposiciones indecentes, proposiciones de matrimonio y un sin fin de guarradas que hacen que sienta vergüenza ajena de formar parte de ciertos movimientos. Esto es una especie de FUENTE OVEJUNA, TODAS A UNO. Es cansino. He llegado a aborrecer a tíos que están buenísimos, porque cada puto día tengo su foto allá donde navego.



¿Y yo que he hecho para merecerme esto?
Pues nada hijo, ser muso de mil libros. 

Por favor, controlar. Que esto me está empezando a dar mucha vergüenza. 

Aún así, Miss C os quiere MUNCHO.